Comparamos precios entre los mejores seguros que se adecúen a tu supermercado. Seleccionaremos las coberturas y te buscamos el mejor precio.
Solicitar precioTener un buen seguro en tu supermercado puede marcar la diferencia entre salir airoso de un imprevisto como pueda ser una inundación ,o tener un grave problema de liquidez que te obligue a cerrar el negocio.
¿Cómo hacer una contratación que te permita saber que estaré cubierto cuando tengas un problema? A continuación te explicamos de forma clara lo que debes tener en cuenta a la hora de elegir el seguro para tu supermercado.
Antes de iniciar la contratación de un seguro, te aconsejamos que te hagas una serie de preguntas para que adaptes la póliza a tus necesidades y así el proceso de contratación sea más eficaz.
Para eso, hemos resumido en 3 pasos todas las cuestiones que debes resolver y tener claras antes y durante de la contratación del seguro. Con estos 3 pasos claros, ahorrarás tiempo, dinero y lo que es más importante, posibles discusiones con la compañía aseguradora a la hora del cobro de las indemnizaciones.
Los tres pasos son los siguientes:
Paso 1: Elegir los bienes o personas que deseas asegurar.
Este paso es la base de la póliza, por ello debes dedicarle tiempo a pensar muy bien qué es lo que quieres asegurar en función de tus circunstancias.
¿Porque es la base de la póliza? Porque todas las coberturas que se definirán después irán orientadas a proteger lo que hayas elegido, es decir, el local, los productos, el mobiliario, el sistema informático, etc.
En un supermercado puedes reducir todo lo que se puede asegurar a tres elementos: El contenido, el continente y las personas.
¿Cómo saber qué debes asegurar? Veamos dos ejemplos prácticos para tener una idea clara.
Ejemplo 1: Supongamos que abrimos un supermercado en un local de alquiler y además trabajas en él haciendo las funciones de encargado.
En este caso te interesará tener asegurado fundamentalmente el contenido, daños a terceras personas y a nosotros mismos.
El contenido, ya que en caso de siniestro cualquier coste derivado de la reparación del mobiliario, equipos informáticos o los productos que estén a la venta en el supermercado, no tenga que salir de tu bolsillo. Respecto a asegurar el local, no sería estrictamente necesario, ya que esto es responsabilidad del propietario del mismo y encarecería la póliza innecesariamente.
Los daños a terceras personas es algo que siempre debes contemplar. Esto es muy fácil de hacer a través de una póliza de Responsabilidad Civil de actividad.
Por último, es aconsejable asegurarse como persona si eres una figura imprescindible en el supermercado, es decir, que si tú no estás, debes cerrar en tu ausencia. En este caso, deberías contar con un seguro de hospitalización, enfermedad e intervención quirúrgica, el cuál te indemnice por cada día de cierre. En este apartado de la web no vamos a centrarnos en este tipo de seguros, si lo deseas puedes encontrar más información aquí (link a seguros de vida).
Ejemplo 2: Supongamos que además de ser el dueño del supermercado, eres propietario del local y tienes empleados que trabajan para ti.
En este caso sí te interesará contratar un seguro que incluya “el continente”, es decir el local, y además “el contenido”, es decir, todo lo que haya dentro del local, ya que el coste derivado de un siniestro en cualquier reparación en el local, en el mobiliario o reposición de productos debería salir de tu bolsillo.
Como ya hemos dicho antes, es muy aconsejable que estés cubierto frente a los posibles daños a terceras personas, para ello al igual que en el ejemplo 1 es siempre muy conveniente añadir una cobertura de Responsabilidad Civil.
Paso 2: Elegir las situaciones o imprevistos frente a los que quieres estar cubierto.
Una vez definido todo lo que quieres asegurar, es el momento de pensar cuales son las situaciones que pueden suponer un mayor riesgo para la seguridad de tu negocio. Anticiparse a estas situaciones, es anticiparse a futuros problemas, lo que te ayudará a elegir de forma adecuada las coberturas de tu póliza.
Algunas de las coberturas pueden ser por ejemplo: robo, incendio, inundación, la rotura del rótulo, actos vandálicos, daños a terceras personas (Responsabilidad Civil), pérdida de beneficios, riesgo eléctrico, defensa jurídica…etc.
Cabe destacar que los siniestros con mayor probabilidad en supermercados por orden son: Daños por agua, robo, rotura de cristales y daños por fenómenos atmosféricos, con lo que estas coberturas son muy recomendables.
Paso 3: Establecer la cantidad de indemnización en € para cada imprevisto.
Una vez definidos los elementos que quieres asegurar dentro de tu supermercado y frente a qué riesgos quieres estar cubierto, el último paso para hacer una buena contratación de un seguro consiste en fijar la cantidad de euros que necesitarías para sufragar los gastos de la reparación de los daños sufridos en caso de un posible siniestro. Es decir, saber cuánto dinero necesitarías para costear las reparaciones y/o reposiciones de productos de tu supermercado en caso de inundación o incendio por ejemplo.
Por ejemplo, imagina que sufres una inundación en tu supermercado, pues bien, en la cobertura por inundación debes fijar una cantidad de dinero como indemnización que, al menos, te permita hacer frente a los costes necesarios para volver a abrir la actividad tras el siniestro.
Hacer una valoración económica ajustada y realista a las circunstancias de tu supermercado te permitirá tener una póliza acorde a tus necesidades. Esto significa que, por un lado tendrás una póliza ajustada en precio, es decir, no estarás pagando por cláusulas sobre dimensionadas, y por otro, será casi improbable que tengas un problema a futuro con la compañía aseguradora a la hora del cobro de la indemnización.
Si has seguido los tres pasos descritos anteriormente, tendrás muy claro lo que quieres asegurar en tu supermercado, frente a qué tipo de siniestros y por qué valor económico, con lo que harás una contratación más rápida y efectiva y ahorrarás tiempo y dinero.
Las compañías aseguradoras tienen productos específicos diseñados para asegurar negocios y para ello utilizan un seguro llamado seguro “multiriesgo”.
¿Y qué es un seguro multiriesgo? no es nada más seguro que aglutina en una sola póliza coberturas para diferentes tipos de siniestros como pueden ser daños de stock, incendio, robo, fenómenos atmosféricos, etc . Dicho de una forma muy resumida, es “un seguro para todo”. Dos ejemplos por todos conocidos son de seguro multirriesgo son el seguro del hogar y el seguro para Pymes.
A continuación describimos un ejemplo de seguro para supermercado destinado a cubrir sus necesidades específicas, tanto en el contenido, como el continente así como de daños a terceras personas, es decir, Responsabilidad Civil.
Los seguros multirriesgo tienen una parte de garantías básicas de contratación obligatoria, y otra parte de garantías opcionales.
A continuación puedes ver las garantías que se suelen ofrecer en un seguro multiriesgo estándar para un supermercado:
Coberturas básicas que puedes contratar en un seguro para supermercado
Coberturas opcionales que puedes contratar en un seguro para supermercados
Dado que este tipo de seguros son proyectos a medida, lo mejor es que a la hora de contratar un seguro para un supermercado te pongas en manos de un profesional que te asesore para definir bien todas las coberturas, así no terminarás pagando por servicios que nunca o rara vez utilizarás.
Por eso te invitamos a asesorarte de forma gratuita y sin compromiso antes de contratar el seguro para tu supermercado. Sólo tienes que rellenar el siguiente formulario, y un agente especializado en pólizas para comercio contactará contigo en los siguientes minutos.
Para finalizar te damos algunos consejos para que puedas ahorrar en el seguro de tu supermercado. Básicamente consiste en tomar cualquier acción en la dirección de reducir el riesgo de posibles siniestros en tu negocio, lo cuál va a favor no sólo de tí, sino también de tus clientes.
Algunas de esas acciones podrían ser las siguientes: